Interpretación del Salmo 96
El Salmo 96 es un canto de alabanza y exaltación a Dios como el único y verdadero Dios. En este salmo, se invita a toda la tierra a cantar y proclamar la gloria y poder de Dios. Se destaca la grandeza y majestuosidad de Dios sobre todas las naciones y dioses falsos.
La grandeza de Dios
El salmista nos recuerda que Dios es digno de alabanza y adoración, y que debemos darle la gloria que le corresponde. Se enfatiza la importancia de reconocer a Dios como el Creador y Señor de toda la tierra, y de rendirle culto con alegría y gratitud.
Proclamar las maravillas de Dios
Además, el Salmo 96 nos exhorta a proclamar las maravillas de Dios entre las naciones, a anunciar su salvación y justicia. Se nos invita a adorar a Dios en su santuario, reconociendo su poder y su reinado sobre toda la creación.
El llamado a la adoración
El Salmo 96 nos anima a cantar y alabar a Dios, reconociendo su grandeza y poder sobre todas las naciones. Nos recuerda que Dios es digno de toda adoración y que debemos proclamar su salvación y justicia a todo el mundo.
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| Cantad a Jehová cántico nuevo; Cantad a Jehová, toda la tierra. Cantad a Jehová, bendecid su nombre; Anunciad de día en día su salvación. Contad entre las naciones su gloria, En todos los pueblos sus maravillas. Porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Temible sobre todos los dioses. Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos; Pero Jehová hizo los cielos. Alabanza y magnificencia delante de él; Poder y gloria en su santuario. Tributad a Jehová, oh familias de los pueblos, Tributad a Jehová gloria y poder. Dad a Jehová la honra debida a su nombre; Traed ofrendas, y venid a sus atrios. Adorad a Jehová en la hermosura de la santidad; Temed delante de él, toda la tierra. Decid entre las naciones: Jehová reina. También afirmó el mundo, no será conmovido; Juzgará a los pueblos en justicia. Alégrense los cielos, y gócese la tierra; Brame el mar y su plenitud. Regocíjese el campo, y todo lo que en él está; Entonces todos los árboles del bosque rebosarán de contento, Delante de Jehová que vino; Porque vino a juzgar la tierra. Juzgará al mundo con justicia, Y a los pueblos con su verdad. |