Interpretación del Salmo 85
El Salmo 85 habla de la misericordia y el perdón de Dios. El salmista reconoce la bondad de Dios y su disposición a perdonar los pecados del pueblo. El salmo también refleja la confianza del salmista en la fidelidad de Dios y su capacidad para restaurar la relación con su pueblo.
El salmo comienza con una petición al Señor para que muestre su favor y restaure la prosperidad del pueblo. El salmista reconoce que el pecado ha causado separación entre Dios y su pueblo, pero confía en la misericordia de Dios para perdonar y restaurar. El salmo es un recordatorio constante de la gracia y el amor de Dios, y de la necesidad de arrepentimiento y humildad por parte del pueblo.
La misericordia y el perdón de Dios
En el Salmo 85 se ve la esperanza en la restauración y la reconciliación con Dios. El salmista alaba a Dios por su fidelidad y su amor incondicional. El salmo también destaca la importancia de vivir en rectitud y justicia, reconociendo que la bendición de Dios está reservada para aquellos que siguen sus caminos.
Buscar la reconciliación con Dios
El Salmo 85 nos enseña sobre la misericordia y el perdón de Dios, su fidelidad y su amor incondicional. Nos anima a buscar la reconciliación con Dios, a vivir en rectitud y justicia, confiando en su gracia y amor para restaurar nuestras vidas.
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Jehová, has sido propicio a tu tierra; Has hecho volver la cautividad de Jacob. Has perdonado la iniquidad de tu pueblo; Has cubierto todos sus pecados. Has reprimido toda tu ira; Has apartado el ardor de tu ira. Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, Y haz cesar tu ira de sobre nosotros. ¿Estarás enojado contra nosotros para siempre? ¿Extenderás tu ira de generación en generación? ¿No volverás tú a darnos vida, Y tu pueblo se alegrará en ti? Muéstranos, oh Jehová, tu misericordia, Y danos tu salvación. Escucharé lo que hablará Jehová Dios; Porque hablará paz a su pueblo y a sus santos, Para que no se vuelvan a la locura. Ciertamente cercana está su salvación a los que le temen, Para que habite la gloria en nuestra tierra. La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron. La verdad brotará de la tierra, Y la justicia mirará desde los cielos. Jehová dará también el bien, Y nuestra tierra dará su fruto. La justicia irá delante de él, Y sus pasos nos pondrá por camino. |