Salmo 118 – Conoce el salmo y su significado

El Salmo 118 es un salmo de agradecimiento o acción de gracias hacia Dios por su amor y fidelidad. En este salmo, el salmista expresa su confianza en el Señor y reconoce su protección y salvación en momentos de dificultad.

El salmista comienza el salmo declarando: «Den gracias al Señor, porque él es bueno; su amor perdura para siempre» (versículo 1). Esta declaración es una invitación a todos a reconocer y agradecer el amor inagotable de Dios. El salmista describe cómo, en varias ocasiones, se vio rodeado de aflicción y peligro, pero el Señor siempre estuvo presente para salvarlo y darle fuerzas.

El salmista destaca la importancia de confiar en el Señor en todo momento, afirmando: «Me sostuvo y me salvó; el Señor es mi fuerza y mi canción, él es mi salvación» (versículo 14). A lo largo del salmo, el salmista expresa su gratitud hacia Dios por su protección y su fidelidad constante.

El Salmo 118 es una elección significativa para celebrar cumpleaños (Salmos de Cumpleaños) debido a su mensaje de gratitud, celebración y confianza en Dios. Este salmo es una expresión de alabanza por la bondad y fidelidad de Dios que perdura para siempre. En un cumpleaños, este salmo puede servir como un recordatorio de la fidelidad de Dios a lo largo de los años pasados y como una declaración de confianza en Su guía y protección para el futuro. Al celebrar otro año de vida, el Salmo 118 nos invita a reflexionar sobre las bendiciones recibidas, agradecer por ellas y renovar nuestra confianza en el amor y cuidado de Dios en el año que está por venir.

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La profecía mesiánica

El Salmo 118 también contiene una profecía mesiánica, que se cumple en Jesús. En el versículo 22, se menciona una piedra que los constructores despreciaron y que se convierte en la piedra angular. Esta piedra representa a Jesús, quien fue rechazado por muchos pero se convirtió en la base fundamental de la salvación.

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En este sentido, Jesús se convierte en el fundamento sólido sobre el cual podemos construir nuestras vidas. Su sacrificio y resurrección nos brindan la esperanza de la salvación y la vida eterna. A través de Jesús, podemos experimentar la protección y el amor incondicional de Dios, tal como el salmista lo expresó en el Salmo 118.

Este salmo nos invita a reflexionar sobre la bondad y el amor de Dios, y a expresar nuestra gratitud a través de la alabanza y la confianza en Él. Que el Salmo 118 nos inspire a vivir cada día reconociendo la presencia de Dios en nuestras vidas y confiando en su amor eterno.


Salmo Católico Completo (Salmo 118)

1 Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia.

2 Diga ahora Israel, que para siempre es su misericordia.

3 Diga ahora la casa de Aarón, que para siempre es su misericordia.

4 Digan ahora los que temen a Jehová, que para siempre es su misericordia.

5 Desde la angustia invoqué a JAH, y me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso.

6 Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre.

7 Jehová está conmigo entre los que me ayudan; por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen.

8 Mejor es confiar en Jehová que confiar en el hombre.

9 Mejor es confiar en Jehová que confiar en príncipes.

10 Todas las naciones me rodearon; en el nombre de Jehová yo las destruiré.

11 Me rodearon y me asediaron; en el nombre de Jehová yo las destruiré.

12 Me rodearon como abejas; se enardecieron como fuego de espinos; en el nombre de Jehová yo las destruiré.

13 Me empujaste con violencia para que cayese, pero me ayudó Jehová.

14 Mi fortaleza y mi cántico es JAH, y él me ha sido por salvación.

15 Voz de júbilo y de salvación hay en las tiendas de los justos; la diestra de Jehová hace proezas.

16 La diestra de Jehová es sublime; la diestra de Jehová hace valentías.

17 No moriré, sino que viviré, y contaré las obras de JAH.

18 Me castigó gravemente JAH, mas no me entregó a la muerte.

19 Abridme las puertas de la justicia; entraré por ellas, alabaré a JAH.

20 Esta es puerta de Jehová; por ella entrarán los justos.

21 Te alabaré porque me has oído, y me fuiste por salvación.

22 La piedra que desecharon los edificadores ha venido a ser cabeza del ángulo.

23 De parte de Jehová es esto, y es cosa maravillosa a nuestros ojos.

24 Este es el día que hizo Jehová; nos gozaremos y alegraremos en él.

25 Oh Jehová, sálvanos ahora, te ruego; oh Jehová, te ruego que nos hagas prosperar ahora.

26 Bendito el que viene en el nombre de Jehová; desde la casa de Jehová os bendecimos.

27 Jehová es Dios, y nos ha dado luz; atad víctimas con cuerdas a los cuernos del altar.

28 Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré.

29 Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia.

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